CATEGORÍA: OPINIÓN / INTERNACIONAL / POLÍTICA
Por Betty Núñez
Donald Trump da positivo a Covid-19. Pobrecito, ¡reelección!
No tengo palabras para describir y aplaudir esta estrategia tan impecable. Pareciera que cada movimiento fue pensado a detalle. Como ya sabemos, el señor Trump no comenzó con el pie derecho en relación al tema Covid-19 y por supuesto que se debía hacer algo al respecto después de unos tragos de cloro o intravenosas de desinfectante.
Anunciamos el contagio, alarmamos un poquito a los fans diciendo que el mesías no está fuera de peligro, pero tiene una excelente recuperación a pesar del riesgo por la edad, obesidad, colesterol, etc. Y para que nos crean, ¡tratamiento experimental de anticuerpos inyectado! Antes de ir al hospital, por supuesto.
Luego el tuit de esperanza, anunciando que será dado de alta en punto de las 17:30 hrs, tras unos días en el hospital, para regresar con toda la energía del mundo a revisar documentos y continuar con el ritmo de trabajo habitual. ¡El candidato que tomó el virus como una servilleta de papel y lo tiró a la basura! ¡Eres nuestro todo, señor Trump!
Hace unos meses escuché a algunos compañeros de clase pedir sarcásticamente la «titulación por pandemia» y pasamos un buen momento riendo acerca de ello. Pero ¿reelección por pandemia? Eso es algo nuevo. Sin duda, la contingencia nos puso creativos a todos. Vaya preciosa estrategia.