CATEGORÍA: OPINIÓN PÚBLICA / MÉXICO / MORELOS / SISMO
Por Majo Rentería
El mexicano puede ser muchas cosas, pero hay algo en lo que se caracteriza: su solidaridad. Esa ayuda la da sin pensar a quién o en cómo. Ya sea ayudar a otros o a nosotros mismos, cuando es necesario. Y es ahí donde resalta lo más bonito que tiene el mexicano. Esa empatía, preocupación y cariño que le da al prójimo sin esperar nada a cambio.
Hace poco más de tres años se presentó un evento inimaginable. Poco tiempo después de realizar el simulacro en conmemoración al sismo devastador de 1985, la Ciudad de México se volvió a ver inmersa en el caos, la destrucción y la desesperación. Pero a pesar de esto, lo que mas salió a relucir aquel trágico día fue la solidaridad.
En medio del desorden, la población encontró organización para hacer hasta lo imposible por ayudar al otro. Ya sea sacando escombros, recolectando víveres, intentando sacar gente atrapada… Siempre se buscó la manera de aportar y salir adelante juntos, a pesar de la situación tan difícil que estábamos pasando. Fue un día de muchas perdidas, tanto humanas como materiales. Se perdieron casas, departamentos y muchos municipios de otros estado, como nuestro Morelos, tuvieron perdidas gigantescas que de no haber sido por la unión que se dio entre la población, el desastre podría haber sido mucho mayor. El pueblo se unió y levantó esos municipios, casas, tiendas, parques y departamentos, a pesar de las circunstancias.
Sabemos que aunque esto sucedió hace ya 3 años, todavía hay lugares y personas afectadas, pero tenemos la seguridad de que, juntos, volverán a recuperarse. Hoy, recordamos a los que perdimos, pero sobretodo agradecemos a esos héroes comunes, a los héroe de a pie, sin capa, que no solo se arriesgaron por los demás, sino que también dieron todos de sí para empezar a levantar un país y dar un ejemplo de la ya comentada solidaridad mexicana al resto del mundo.