Con el surgimiento de la pandemia por COVID-19, los medios de comunicación han sido, aún más, pieza clave en la transmisión de información.
- Los medios de comunicación tradicionales han vuelto a posicionarse como referentes informativos. Un crecimiento del tráfico web acompañado de un mayor tiempo dedicado a la lectura de los medios, recupera la confianza de sus lectores en un 25%. El caso contrario sucede en las redes sociales donde, debido a la gran cantidad de fake news, la confianza en estas plataformas disminuye en un 29%.
- A pesar de este incremento en las audiencias, la inversión publicitaria ha caído, principalmente en el sector de la automoción y el sector del ocio y entretenimiento, así como el de la cultura. A ello hay que añadir que el bloqueo de keywords relacionadas con el coronavirus fomenta la caída de la publicidad. La mayoría de información a la que acceden los usuarios en la actualidad está relacionada con este término y eso dificulta el posicionamiento de los anuncios y, por tanto, su inversión.
- El confinamiento ha desembocado en la cancelación de numerosos eventos a nivel mundial. Esto, unido a los nuevos hábitos de consumo y el desconocimiento de la futura vuelta a la normalidad en el ámbito social, plantea un nuevo escenario. Por lo menos en el corto-medio largo plazo se prevé un mayor enfoque en webinars y sesiones online que en eventos presenciales.
- Centrándonos en el periodismo, muchos son los muros informativos que antes de la pandemia trabajaban en la transformación de sus modelos de negocio hacia un modelo de pago de contenidos. Aunque muchos medios mantienen invariable su modelo de negocio hasta el momento, muchos otros continúan trabajando en ello. Hasta ahora se combina la necesidad de la libre circulación de la información con su supervivencia. Por tanto, esta transformación se lleva a cabo a través de modelos parcialmente abiertos, promoción de suscripciones y promociones o muros de registro en vez de pago.
Tomado de: Adverthia.com