UNINTERPress

Por Carol Ozegueda

San Francisco Mihualtepec es un pueblito Mazahua que se encuentra en el Edo. De México, como en muchos lugares de nuestro país, aquí también se vive está tradición de una manera muy peculiar.

A partir del día 1 de noviembre la gente pone sus ofrendas para sus fieles difuntos, sobre ellas uno de los platillos que acostumbran poner es mole y/o mole de olla, pan, fruta.

Sus ofrendas se distinguen porque las hacen en forma de una casita con una base de carrizos o cañas, cubiertas de una flor de temporada conocida como «flor de muerto», a partir de la tarde los habitantes desde niños hasta personas mayores empiezan a tocar las campanas de la iglesia para esperar a que lleguen las animas benditas mientras la gente está limpiando el panteón, adornando con flores y prenden sus ceras en las tumbas, las campanadas están hasta pasadas las 12 de la noche, durante este lapso ya que empieza a hacer frío prenden una enorme fogata para esperar a los mayordomos (los encargados de festejar a los santos). Un grupo de jóvenes y hombres alrededor de 20 o 30 que van con su hayate pidiendo su «calaverita» con frases como: «un elotito para los campaneros» o «un chayotito para los campaneros», los habitantes dan pan, café, alcohol, entre otras cosas. Al terminar su recorrido por todo el pueblo depues de la medianoche se reparten entre todos, junto con las personas y niños que estuvierón ayudando a tocar las campanas, de ahí la frase que es para los «campaneros».

El 2 de noviembre solo asisten a una celebración eclesiastica que se realiza dentro de el panteón, siendo las 3 pm truenan cuhetes para despedir a las almas que vinierón del más allá