UNINTERPress

Por: Carol Ozegueda.

Si bien sabemos; FUMAR MATA. Algunos de los riesgos para la salud que son consecuencia del tabaco son: incremento de la probabilidad de sufrir cáncer o disminución de la capacidad pulmonar, problemas cardiovasculares son pocos de los efectos provocados por esta droga.

No solo está en los riesgos visibles, también en los problemas médicos que no vemos a tiempo, pero que sus consecuencias suceden a medio y largo plazo. La innovación de los cigarrillos electrónicos tampoco ayuda, debido a que las últimas investigaciones afirman que son igual de perjudiciales que el tabaco.

El tabaco afecta al tamaño y volumen de ciertas partes del cerebro de los adolescentes, esto según un nuevo estudio publicado en la revista Neuropsychopharmacology, muestra las diferencias en el desarrollo del cerebro en adolescentes que provoca el tabaco.
En esta edad, donde el efecto de las drogas es más agudo sobre el cerebro de los individuos, el consumo de los cigarrillos y la nicotina es aún peor que en las personas adultas.

Existen diferencias importantes en partes del cerebro entre adolescentes fumadores y no fumadores, aun cuando la adicción no es demasiado «grave». El tamaño y volumen de la ínsula eran muy distintos en los diferentes grupos de jóvenes, variaban por el consumo de tabaco.

Se encuentra en la superficie lateral del cerebro, se relaciona con el sistema límbico, el que controla las emociones y los sentimientos. Los cambios provocados por el tabaco afectarían de manera directa al control directo del estado interno de los adolescentes o a la toma de decisiones.

En una edad tan sensible como esta, el tabaco puede cambiar drásticamente el desarrollo del cerebro de los jóvenes y afectar de manera importante a su personalidad. Estudios como este recuerdan lo importante de prevenir el consumo de drogas «socialmente aceptadas».