Por: Luis Roberto González
Cada vez se le da más importancia al cuidado del medio ambiente, sin embargo, los científicos y ambientalistas han procurado experimentar con tecnologías y técnicas eficaces que cualquier persona pueda realizar desde su casa aportando a su protección. Se ha puesto de moda el colocar “techos verdes”, es decir, poner vegetación sobre las casas donde se pueda cosechar algunos frutos, mismo que provee un filtrado de agua de lluvia y de gases o metales pesados que se encuentran en la atmósfera; además actúan como reguladores de climatización y barrera acústica.
Sin embargo, un estudio reciente publicado en el diario “Energy and Building”, señala que los techos pintados de color blanco resultan 3 veces más eficaces que los verdes. Esto se debe a que reflejan con mayor facilidad la luz a la atmósfera y en las partes bajas de las ciudades bajaría la temperatura. Además es un cambio de bajo costo. La única desventaja es que disminuirían la diferencia de temperatura a 1.6 km, aproximadamente, sobre la tierra, según una simulación climática de la Universidad de Stanfor.
Los techos negros también resultan una opción, ya que absorben el calor y disminuiría el efecto de “isla de calor” que se presenta en las zonas urbanas grandes, como metrópolis. Pero definitivamente, según los investigadores de Lawrence Berkeley National Laboratory, los techos color blanco son los de mejor efecto en protección al ambiente, por lo que aquellos ambientalistas deberían elegirlo incluso sobre los verdes.

Debe estar conectado para enviar un comentario.